jueves, 18 de enero de 2018

TE ODIO

Para leer escuchando Wrecking Ball de Mother Mother






Tal vez estoy en tu mesa, o en la de a lado, quizá estoy en la barra o te abrí la puerta cuando apenas entrabas, sin que me vieras, sin que sintieras cómo inhalaba tu perfume.

Tal vez te odio porque no te entiendo, tal vez ni siquiera te odio, no me respondas diciendo ¿qué es el odio?


No sé, quizá mi cabello es oscuro y corto o largo y rizado, quizá te veo de frente mientras pienso que eres detestable, y cuento los lunares de tus hombros.

Quizá te admiro en secreto o solo eres diferente y me fascinas, muy a mi pesar.


Quizá tu voz me ha encantado, tus ideas y tus ademanes, esa manera de cuestionar todo y de estar en mi contra para después defenderme ante los demás y ponerte de mi lado.


Quizá mientras platico con mi crew de esa última conquista que nada importa, estoy viendo a lo lejos, como él toma tu mano, sin que te inmutes, mujer de colores y sabores.


Tal vez me he rendido a ti desde el principio y eso es lo que me jode, me incomodas tú, me incomodan ellos notándolo y tú sonriendo con tanto cinismo. Te detesto por pensar tanto, por poner escenarios que no esperábamos.

Detesto cómo cada uno de nosotros queremos acaparar tu atención en esta mesa mientras observamos tus labios rosas decir tanto, estar en desacuerdo con cada uno de nosotros y al mismo tiempo mirarnos con tanta aprobación.

Me jode notar cada movimiento de tus hombros, de tus labios, de tu cuello.

Me jode cómo lo miras a él cuando hablas de... ya no pongo atención.

Me jode cuando miras al otro para reír y decirle que es increíble.

Ponme atención maldita, debate conmigo, escúchame, déjame mirarte y derretirme en tus ojos, sin que te des cuenta, sin que yo lo haga


Cada gesto tuyo, coronado con una curiosidad infantil.

Quizá tengas que fascinarme hasta la locura en el más arrebatador de los secretos.

Quizá mañana le cuento a uno de ellos y dentro de seis años resulte que te enteres y te sientas incómoda.


Pero no dejes de hablar, de fascinarme, sigue preguntando tanto, sigue hablando, sigue riendo y sonriendo, mátame, si no te miro es porque eres peligrosa, pero me encantas, quizá mi corazón late más rápido y mi cerebro se parte.

Eres insoportable.


Ojalá la noche no termine,

Ojalá él te aburra y… dijiste que no habían finales felices, este será tristísimo. 
Ven, destrúyeme.

Un trago de cerveza, otro, otro, la noche más triste cariño.


Te bautizo como mi noche más deliciosa, mi noche más triste.




    Pic Pinterest (https://www.pinterest.com.mx/pin/603412050047154535/)



miércoles, 17 de enero de 2018

Ella




Para leerse escuchando Ghosting de Mother Mother






Todas las pretensiones y caprichos salen de tu ombligo.
Mis berrinches e inseguridades de tus hombros suaves.  
Mis temores, de esos ojos, de esa boca que besa arrebatando la vida, mi vida.


Dijiste que tu estandarte era la libertad, me pediste que fuéramos amantes porque era tu manera de querer, y tengo la sensación de tenerte como el aroma frutal de la tarde, apenas un segundo en mis brazos hasta que desapareces en el aire.


Dices que no es que no puedas quedarte, es que no quieres, mujer de flores blancas y hojas verdes, nunca estás por completo. Las estrellas, la noche, esta luna insoportable, todo me enfada por ti.


Tomo tu mano, beso tu cuello, miro tus ojos pero tengo la certeza, por mi paranoia, de que tus pensamientos están lejos. ¿Qué piensas?, ¿qué miras?, ¿qué quieres?



Esta tarde, como todas, es tuya, ya nunca me pertenecerá alguna, mi desamparo radica en querer meterte en este frasco y llevarte conmigo para siempre, pero, a menos que sea una metáfora, niña mía, cómo meto luz aquí. Entonces camino detrás de ti, miro cómo ves las ventanas, los árboles, cómo te maravillan los colores, mi sonrisa. Miro el cabello que se te escapa de las trenzas que colocas alrededor de tu cabeza y se acerca a tu cara, a esos labios. Miro. Te miro (mírame mujer).
Lloro por dentro, es un llanto dulce. Todo este sabor tuyo, qué hare si un día…



¿Las ninfas eran igual de fugaces que tú?, toma mi mano, no me sueltes, te entrego mis ideas, mis pensamientos, mis ideales, mis malas costumbres, mis miedos cervales y si quieres todos mis besos. 
Te entrego todo pero no me sueltes.